Hoy, hay una actualización interesante sobre la defensa de los cielos ucranianos.
Aquí, la defensa aérea ucraniana recibió uno de los mayores impulsos, ya que surgieron informes de que un nuevo y poderoso radar volador de Suecia probablemente ya había llegado a Ucrania. Este sistema ayudará a las defensas aéreas ucranianas no solo en sus operaciones ofensivas, sino que también apoyará significativamente su capacidad para defender la retaguardia ucraniana de los constantes ataques rusos de misiles y drones.
Suecia se ha comprometido a entregar dos aviones ASC 890 de alerta y control aerotransportado a Ucrania como parte de su paquete de ayuda militar más grande hasta la fecha, valorado en aproximadamente 1.160 millones de euros. La decisión de Suecia marca una mejora significativa en las capacidades de defensa aérea de Ucrania.

Estos aviones, equipados con avanzados sistemas de radar Erieye, están diseñados para proporcionar vigilancia de largo alcance e identificación de objetivos. Aunque aún falta la confirmación oficial, hay informes de que un avión de calibración estaba volando sobre el oeste de Ucrania, lo que podría indicar que los ucranianos están realizando los preparativos finales, recalibrando y ajustando los radares terrestres para la llegada de los nuevos aviones suecos.

El ASC 890, basado en la plataforma Saab 340, es un avión de alerta temprana y control aerotransportado. Cuenta con el radar Erieye, una matriz escaneada electrónicamente activa y fija montada en la parte superior del fuselaje. Este sistema de radar ofrece un alcance de detección de hasta 450 km y puede rastrear múltiples objetivos simultáneamente, incluidos aviones, misiles y drones. Operando a altitudes de 6,000 metros, el ASC 890 puede monitorear vastas áreas, proporcionando datos en tiempo real a los centros de mando y mejorando la conciencia situacional. Esencialmente, aeronaves como el ASC 890 sirven como estaciones de radar y centros de mando voladores, coordinando operaciones aéreas y terrestres de manera efectiva, con su tamaño compacto y fiabilidad que lo hacen ideal para despliegues rápidos.

En el contexto de la infraestructura de defensa actual de Ucrania, el ASC 890 representa una mejora sustancial. Los sistemas de radar existentes en Ucrania son principalmente terrestres, y aunque algunos de ellos tienen un alcance de alrededor de 350 a 400 kilómetros, su inmovilidad limita su rango y los hace vulnerables a obstrucciones del terreno.

La plataforma aérea del ASC 890 supera estas limitaciones, ofreciendo una capacidad de vigilancia más amplia y flexible. Esta mejora es crucial para la detección temprana de amenazas entrantes, el seguimiento más preciso de ellas, y un mejor tiempo de respuesta que permitiría a la defensa aérea ucraniana interceptar las amenazas aéreas con mayor éxito.

La integración del ASC 890 es particularmente significativa a la luz de la adquisición de cazas occidentales por parte de Ucrania, notablemente los F-16.

Después de que el fabricante, SAAB, realizara algunas actualizaciones para mejorar la interoperabilidad entre los dos sistemas, el ASC 890 ahora puede proporcionar a estos aviones una conciencia situacional completa, guiándolos hacia los objetivos y alertándolos de amenazas potenciales. Como resultado, estos AWACS mejorarán significativamente el alcance de compromiso de los F-16, permitiéndoles utilizar sus modernos misiles aire-aire a su máximo alcance, además de proporcionar una mejora significativa al limitado alcance de detección de radar del F-16.

Esta sinergia mejora la efectividad operativa de los cazas, permitiendo misiones más precisas y coordinadas. Además, los datos del ASC 890 pueden incluso apoyar a los cazas ucranianos de la era soviética, extendiendo sus capacidades operativas a pesar de las disparidades tecnológicas. Compartiendo datos de radar en tiempo real e información sobre amenazas con los centros de mando terrestres, los ucranianos pueden luego retransmitir actualizaciones de objetivos y conciencia situacional a los pilotos vía radio segura o enlace de datos. Esto permite que aeronaves más antiguas, a pesar de carecer de radares modernos a bordo, operen de manera más efectiva mediante la guía externa y el apoyo de advertencia.


Por el contrario, la plataforma equivalente de Rusia, el Beriev A-50, ha enfrentado desafíos significativos. Desde principios de 2024, Ucrania ha logrado atacar y destruir al menos dos aviones A-50, utilizando sistemas como la defensa antimisiles Patriot.


Estas pérdidas han obligado a Rusia a operar su flota restante de A-50 aún más lejos de las líneas del frente, disminuyendo su efectividad de vigilancia sobre territorio ucraniano.

La presencia reducida de los A-50 cerca de Ucrania obstaculiza la capacidad de Rusia para llevar a cabo una vigilancia aérea continua y coordinar operaciones aéreas de manera efectiva.

En general, la llegada de los aviones ASC 890 de Suecia es un beneficio estratégico para Ucrania, especialmente en medio de las incertidumbres sobre el apoyo continuo de inteligencia estadounidense. Estos aviones no solo refuerzan las capacidades de defensa aérea y vigilancia de Ucrania, sino que también aseguran una mayor autonomía en la planificación operativa y la respuesta ante amenazas.

A medida que la guerra continúa, el ASC 890 llenará vacíos como un activo crítico en la protección del espacio aéreo ucraniano y en la mejora de la efectividad de sus operaciones aéreas.

Comentarios