DE MAL EN PEOR. Los norcoreanos intentan una nueva táctica. SE ARREPIENTEN DE INMEDIATO.

Hoy hay muchas noticias interesantes provenientes de la dirección de Kursk.

Dado que los asaltos rusos y norcoreanos en Kruglyenke resultaron ser un completo desastre, con enormes pérdidas para ambos bandos atacantes, los comandantes rusos decidieron redirigir las oleadas humanas norcoreanas a otra parte del saliente. Sin embargo, sus tácticas no cambiaron, y con los ucranianos ahora bien preparados para contrarrestar las cargas masivas norcoreanas, el resultado final fue aún peor que antes.

Previamente, el esfuerzo conjunto de las fuerzas rusas y norcoreanas había sufrido grandes pérdidas durante su ofensiva al oeste de Malaya Loknya. A pesar de comprometer importantes recursos en el asalto, no lograron alcanzar la ciudad, incurriendo en cientos de bajas a cambio de un simple punto de apoyo en el bosque. Esto los obligó a reconsiderar su plan de ataque.

Dado que su asalto en la parte occidental del saliente de Kursk no logró resultados significativos, las fuerzas rusas cambiaron su enfoque hacia el este, centrándose en el área alrededor de Cherkasskoye Porechnoye. Su objetivo sigue siendo el mismo: cortar una porción significativa del saliente de Kursk controlado por Ucrania. Capturar Cherkasskoye Porechnoye abriría el camino para un avance hacia el sur, hacia Kasachya Loknya, cortando una importante ruta de suministro a Malaya Loknya, ya que los intentos convencionales de tomar la ciudad desde el norte y el este han demostrado ser imposibles.

Los rusos aspiran a obtener más éxito en el flanco oriental desplegando soldados norcoreanos para asaltar de frente los bosques al norte de Cherkasskoye Porechnoye y Russkoye Porechnoye. Asegurar estos bosques permitiría a las tropas norcoreanas concentrar sus fuerzas bajo una relativa cobertura, lo que les facilitaría formar grandes grupos de asalto para abrumar a los defensores ucranianos en los dos asentamientos por medio de la superioridad numérica. El control de ambos pueblos les permitiría lanzar ataques adicionales hacia el sur a través del bosque, ejerciendo una presión significativa sobre el núcleo del saliente ucraniano.

Si observamos el mapa topográfico, podemos ver que la mayor parte de las alturas en la región consisten en campos abiertos. Esto significa que los bosques son las únicas posiciones tácticas donde se pueden establecer puestos de tiro efectivos gracias a la cobertura de los árboles. Además, su ubicación al norte de Russkoye Porechnoye y Cherkasskoye Porechnoye proporciona tanto control de fuego como acceso a ambos pueblos, que se encuentran en las tierras bajas cerca del valle del río Sudzha.

Desafortunadamente para los norcoreanos, su primer – y pronto último – obstáculo será cruzar los campos abiertos frente a estos bosques. Los comandantes rusos habían presenciado la devastación causada por los drones y la artillería ucranianos a los asaltos de infantería no respaldados en los últimos días, pero aun así se negaron a apoyar a sus aliados norcoreanos con blindados o artillería. Prefirieron utilizarlos como simples oleadas humanas de asalto, diseñadas únicamente para debilitar las posiciones ucranianas y absorber el grueso de la defensa ucraniana.

Imágenes de combate muestran a combatientes norcoreanos cargando a través de los campos en grandes grupos compuestos únicamente por infantería. Habiendo recibido solo unas pocas semanas de entrenamiento, la mayoría carecía de conocimientos sobre tácticas modernas de guerra, lo que los llevó a cruzar los campos abiertos en grandes grupos, en lugar de utilizar tácticas de pequeños grupos de infantería que los rusos han adoptado cada vez más en los últimos tiempos. Esto los convirtió en blancos fáciles para la artillería ucraniana mientras corrían hacia las líneas de árboles. Los operadores de drones ucranianos rápidamente tomaron el cielo, atacando con precisión letal a los grupos dispersos de soldados norcoreanos. Varios norcoreanos intentaron derribar los drones con armas ligeras mientras volaban cerca, pero los drones demostraron ser demasiado ágiles y alcanzaron sus objetivos. Finalmente, el ataque norcoreano fracasó, con la eliminación completa del grupo de asalto en una brutal e inútil carga a través de los campos abiertos.

En general, los ataques norcoreanos mal ejecutados, agravados por su falta de conocimientos sobre la guerra moderna, prepararon el terreno para el desastre, permitiendo a los ucranianos explotar sus debilidades e infligir grandes pérdidas. El fracaso de los norcoreanos en asegurar los bosques permitirá a los ucranianos reforzar considerablemente sus defensas en la región y prepararse para un futuro ataque, haciendo que cualquier intento renovado sea aún más catastrófico. Este revés probablemente obligará a los generales rusos a buscar otro vector de ataque en un intento desesperado por recuperarse de sus fracasos repetidos.

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