¡Intento de penetración profunda rusa APLASTADO!

Hoy, hay noticias interesantes desde la dirección de Kurakhove.

Aquí, los rusos rompieron el estancamiento y lanzaron un asalto sorpresa masivo para atravesar la línea defensiva ucraniana. A pesar del ritmo de combates previamente menos intenso en la zona, las tropas ucranianas estaban bien preparadas para cualquier escenario y asestaron un golpe mortal a la columna blindada enemiga.

Tras el avance ruso estancado poco después de la captura de Kurakhove, las fuerzas rusas lanzaron un asalto mecanizado masivo desde el pueblo de Andriivka para recuperar el impulso tras semanas de combates de desgaste. Con las conversaciones sobre un posible alto el fuego o una congelación negociada del frente, esta ofensiva fue particularmente significativa para los comandantes rusos, que están bajo una inmensa presión del alto mando para capturar tanto territorio como puedan mientras aún tengan oportunidad. Esto también se alinea con uno de los objetivos a largo plazo de Rusia: capturar por completo el Óblast de Donetsk, ya que en este sector están muy cerca de la frontera regional.

El plan consistía en atravesar las líneas ucranianas mediante un asalto mecanizado sorpresa a gran escala desde Andriivka hacia Oleksiivka. Los comandantes rusos creían que una demostración de fuerza repentina y abrumadora tomaría por sorpresa a los defensores ucranianos y provocaría una retirada masiva. Esto marcó un cambio drástico respecto a su patrón reciente de ataques con pequeños grupos de infantería, que habían generado ganancias limitadas debido a las operaciones precisas y bien coordinadas de drones ucranianos.

Además, al abrirse paso rápidamente, los rusos esperaban poder superar y eliminar a los operadores de drones ucranianos situados en y alrededor de Oleksiivka, para evitar que volvieran a frenar su avance.

Sin embargo, los defensores ucranianos habían anticipado tal movimiento. Drones de vigilancia, tanto diurnos como nocturnos, monitoreaban constantemente las posiciones y movimientos rusos. A pesar de la disminución de los asaltos mecanizados rusos debido a pérdidas pasadas, las fuerzas ucranianas continuaron minando extensamente las posibles rutas de ataque y establecieron nuevas defensas fuertes en la zona, además de reforzar las posiciones existentes.

El asalto comenzó alrededor de las seis y media de la mañana. Una columna rusa compuesta por aproximadamente 12 vehículos blindados, incluidos tanques, vehículos de combate de infantería y un camión Kamaz, avanzó a través de Andriivka e intentó rodear las posiciones ucranianas avanzadas. Sin embargo, debido al reconocimiento aéreo con drones, ya habían sido detectados en los accesos, lo que permitió a los ucranianos prepararse para abrir fuego. Una vez que la columna salió del pueblo, entró directamente en un campo minado ucraniano, lo que inmovilizó al tanque de cabeza y detuvo el convoy.

La artillería ucraniana y los operadores de drones desataron inmediatamente un bombardeo preciso. Municiones de racimo cubrieron el área, golpeando a la infantería que intentaba desmontar y huir de los vehículos atrapados, mientras drones lanzaban granadas directamente en compartimientos de tripulación y refugios. Esto condujo a una escena caótica cuando las fuerzas ucranianas enviaron drones kamikazes para rematar a los sobrevivientes ocultos entre arbustos y casas ya destruidas. En menos de treinta minutos, toda la primera oleada fue destruida, con siete vehículos destruidos, cinco más dañados y alrededor de 40 soldados rusos muertos o heridos.

Ignorando el fracaso devastador de la primera oleada, los comandantes rusos siguieron adelante y lanzaron un segundo asalto alrededor de las ocho de la mañana, una hora después de la destrucción del primero, con dos vehículos blindados y aproximadamente una docena de soldados. Sin embargo, las fuerzas ucranianas estaban totalmente preparadas y, una vez que el enemigo entró en la zona de muerte, fueron inmediatamente alcanzados con fuego de precisión y destruidos, mientras que la infantería acompañante quedó expuesta y fue rápidamente neutralizada.

La tercera oleada llegó alrededor de las diez de la mañana, compuesta por tres vehículos blindados que fueron atacados por drones ucranianos en las afueras occidentales de Andriivka y eliminados rápidamente.

Cabe destacar que, tras la derrota del avance ruso, la fuerza aérea rusa llevó a cabo intensos bombardeos con bombas planeadoras sobre las posiciones sospechosas de operadores de drones ucranianos en la retaguardia.

Sin embargo, según informaron los soldados ucranianos en el terreno, todos los equipos de drones ucranianos sobrevivieron con éxito al bombardeo de represalia ruso.

En general, la obsesión de Rusia con lograr una ruptura mediante la fuerza bruta solo le ha dado otra victoria a Ucrania. A pesar de sufrir incontables pérdidas en ataques similares de columnas blindadas durante toda la guerra, los comandantes rusos siguen creyendo que el peso numérico puede romper las defensas ucranianas, demostrando una vez más su incapacidad para adaptarse adecuadamente al campo de batalla moderno.

En cambio, este asalto ofreció un ejemplo de manual de cómo no conducir una guerra mecanizada contra un oponente moderno y bien preparado, ya que los ucranianos diezmaron la primera y más grande oleada en menos de treinta minutos.